¡Aloha!
Llegan las vacaciones, y aquí me tenéis de nuevo, sí, para daros caña! …¿qué pasa?
¡Es que no me dejáis más remedio, lo siento! ¡ojalá tod@s fuerais gente con principios, gente con valores, que respetarais a la Naturaleza y a los Animales, pero por desgracia no es así, ¿y qué pasa? Pues que llega el verano y con él, las vacaciones, los abandonos de animales y los incendios, ¿te suena? ¿o estás ya en Formentera tostándote al sol?
Ya sé que tienes todo el derecho a disfrutar de tus anheladas vacaciones, pero no menos derecho que un perro a ser cuidado y ser querido por sus supuestos dueños (no me gusta esta palabra, considero que en esta vida nadie es dueño de nadie ni de nada), pero para much@s insensat@s, llegan las vacaciones y… ¿qué hacemos con el perro ahora? ¡Buaaa… la residencia canina es muy cara! ¡Ostras! es que cuando lo compramos para hacer el regalito de Navidad a los niños (cuál juguete), no caímos en las vacaciones de verano, y ahora es una pasta mantener a este bicho! ¿Sabes qué? lo dejamos aquí en la cuneta (a 40 ºC) con un poco de agua y alguna alma caritativa ya lo recogerá… nosotros tenemos cosas más importantes en las que pensar (como ir a tostarnos a la playa)….
Sí amig@s, esto es una realidad, para mí, una de las más crueles que existe (por no hablar de los toros claro…), y por supuesto, otra vez el artífice es el ser humano… ¡cómo no! Por un momento os emplazo a practicar un poco de empatía, estoy segura de que much@s no sabéis de qué estoy hablando… se trata de ponerse en el lugar del otro, en este caso, del perrito abandonado, ese que ha formado parte de una familia que lo adquirió un día, para que los niños no se aburrieran, pero que ahora ha pasado de ser un divertimento a ser una obligación, una carga, un gasto, y de repente, de la noche al día, el pobre animal se encuentra, muerto de sed por el calor, bebiendo de una botella de plástico que han dejado derramándose en la cuneta y en cuanto se da cuenta, el coche en el que iba, arranca sin piedad, y el pobre perrito, totalmente desconcertado, sin entender el porqué han partido sin él, se pone a correr con todas sus fuerzas, anteponiendo su amor por esos humanos a la sed que tiene, y corre y corre aún más, como si se acabara el mundo, detrás del coche de «su familia», el coche que nunca alcanzará, arriesgando su vida en la carretera (probablemente acabe atropellado) y dejando su suerte en manos del destino… Si, ya lo sé lo pinto muy dramático, pero esta escena, para que seáis conscientes, sucede cada verano ¡miles de veces! ¿os lo podéis creer? a mi francamente me cuesta mucho, lo encuentro tan cruel y tan espeluznante!
Ésta es pues una llamada, a todas las personas y familias que tengáis animales (he hablado de los perros, pero también hay gatos, pajaritos, mis hermanas tortugas y otros muchos pobres inocentes) para que os hagáis responsables de vuestros actos, que lo penséis mucho antes de comprar un animal (además ¿por qué compráis si se pueden adoptar en refugios y protectoras?), no son juguetes, son seres vivos, seres que tienen sentimientos, que necesitan ser cuidados y, sobretodo, ser amados, si si ¡igual que vosotr@s humanos! Así que por favor no los adquieras sino te puedes hacer responsable, y sobre todo no los abandones… si eres capaz de hacerlo solo puedo decir que eres un(a) desgraciad@ (por no decir hij@ de p…) es un acto de crueldad e insensibilidad tan grande, que solo un humano es capaz de hacerlo, por eso me gusta tanto el eslogan de la famosa campaña «Él nunca lo haría», es tan cierto…
Y paro ya por hoy porque estos temas me ponen muy nerviosa, y ya me estoy calentando, ya sabéis que no tengo pelos en la lengua… así que lo dicho, disfruta de las vacaciones y cuida a los tuyos!
¡Gracias!
Aquí te dejo las frases de hoy… Toma consciencia y reflexiona por favor…
«La grandeza de una nación puede ser juzgada por el modo en que tratan sus animales» Mahatma Gandhi.
«El Amor por todas las criaturas vivientes es el más noble atributo del hombre» Charles Darwin